El jardinero habló sobre su futuro con los Yankees tras una temporada complicada
Una temporada difícil para el jardinero de los Yankees de Nueva York, Aaron Hicks, está llegando a su fin, y pareció admitir que un cambio de temporada baja podría ser lo mejor para todas las partes.
"No lo sé", le dijo Hicks a Dan Martin del New York Post cuando le preguntaron si podría jugar en Nueva York un año más. "Los Yankees tendrán que tomar una decisión y esperaré lo que pase. Realmente no es mi decisión".
El manager Aaron Boone cree que Hicks aún podría desempeñar un papel "muy importante" para los Yankees, pero reconoció que la adquisición en la fecha límite Harrison Bader, quien probablemente salga de la lista de lesionados el martes, podría quitarle tiempo de juego.
Hicks espera que Bader "entre y comience a jugar todos los días, como debería", pero también cree que podría cambiar las cosas si se le dan más oportunidades, ya sea en el Bronx o en cualquier otro lugar.
"A partir de ahora, siento que cuanto más juego, mejor voy a jugar", dijo Hicks. "Eso no es lo que está pasando en este momento. Las cosas están difíciles en Nueva York... Si sienten que esto no es lo adecuado para mí, esa es su decisión. Si me voy a otro equipo, sé que puedo ayudarlos".
Hicks a menudo ha sido un colaborador sólido durante sus siete temporadas en el Bronx. Una campaña de 2018, la mejor de su carrera, en la que conectó 27 HR's con un OPS de .833, llevó al equipo a otorgarle una extensión de siete años.
Pero el jugador de 32 años, a quien le quedan otros tres años y $30.5 millones en su contrato, ha tenido problemas para cumplir con las expectativas del contrato. Después de jugar solo 145 juegos durante las primeras tres temporadas de su contrato gracias a una combinación de lesiones y la campaña 2020 acortada por la pandemia, Hicks ha logrado el peor OPS de su carrera de .624 con solo 16 extrabases en 415 apariciones en el plato este año.
Las cosas llegaron a un punto crítico el 9 de septiembre cuando lo enviaron a la banca a la mitad del juego después de que un par de errores de juego en los jardines provocaron abucheos de los fanáticos.